Harris Tweed - Rückkehr einer Legende

En las Hébridas, frente a la costa noroeste de Escocia, el tiempo es duro y el paisaje accidentado. La mayoría de los días sopla un viento fresco. Aquí la gente es resistente, lo que también se refleja en su ropa. Inspirado en los colores del paisaje, el Harris Tweed es el aristócrata entre los tweeds, tejido en las islas durante siglos. En la actualidad, el tejido está resurgiendo, en parte gracias a nuevos clientes como Nike y Chanel. Hoy, Harris Tweed celebra un estilo de vida. 218 mujeres y hombres vuelven a tejer tweed, exclusivamente a domicilio. Porque esa es la condición para obtener la licencia. 360° GEO Reportage visitó la isla y a sus tejedores. Rebecca Hutton busca un nuevo patrón. Esta tejedora de 35 años quiere probar algo nuevo, alejado de los patrones comunes que sus compatriotas producen en sus telares caseros para las grandes hilanderías de la isla. A finales del siglo XIX, el áspero tejido de lana que protegía a granjeros y pescadores de la humedad y el frío se convirtió en la tela noble de la aristocracia británica. Hasta la década de 1960 tuvo una gran demanda. Después, el tejido cayó en el olvido. 2006 fue casi el final. Harris Tweed ya no podía competir con los tejidos baratos del Lejano Oriente. Muchos residentes tuvieron que abandonar las islas para buscar trabajo en otra parte. Hoy, los bienes duraderos y sostenibles vuelven a ser muy demandados. Clò-Mòr, el gran paño, como se llama en gaélico al Harris Tweed, está muy solicitado. Por eso, Rebecca Hutton ha vuelto a su isla natal. Sus padres no eran tejedores. Pero el hecho de que ahora pueda retomar el legado de sus abuelos significa mucho para ella. Como todas las tejedoras, trabaja en casa. Así está prescrito. El nombre Harris Tweed está protegido por ley desde 1993. El tejido debe ser de pura lana virgen, y el hilo sólo puede hilarse y teñirse en las Hébridas Exteriores. El mayor cliente es Gran Bretaña, para las chaquetas clásicas y el diseño de interiores. Pero Japón, aficionado a los accesorios de cuadros escoceses, también ha contribuido al resurgimiento del Harris Tweed. La influencia de las casas de moda parisinas ha impulsado enormemente su popularidad. Para mantener el interés por su tejido, los tejedores han tenido que seguir buscando nuevos mercados. Entre otras cosas, con nuevos patrones. Rebecca Hutton ha encontrado lo que buscaba. Ahora sólo tiene que ingeniárselas para volver a tejer el complicado patrón antiguo.